Hernán Briones: “Estamos mirando a Latinoamérica, analizando Colombia y Ecuador, no tenemos miedo a salir”
Tras inaugurar planta en Arica y afinar su primera fábrica en Arequipa para 2020, Cbb irrumpirá en el mercado peruano, en el cual también evalúa inversiones.
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Una inversión de US$ 16 millones materializó Cementos Bío Bío (Cbb) en su nueva planta ubicada en Arica, la cual inauguró ayer con una capacidad de producción inicial de 200 mil toneladas, equivalentes a ocho millones de sacos de 25 kilos por año.
La puesta de la quinta planta cementera del grupo en el país consolida su estrategia de expansión geográfica a lo largo de sus 62 años de historia, que partió en Talcahuano, y siguió en Antofagasta, Curicó y San Antonio, para ahora instalarse en el extremo norte para abastecer a las principales ciudades de la zona.
Este proyecto representa un paso importante en los planes internacionales del grupo. Del orden de la mitad de producción de la nueva planta se destinará al mercado peruano, en una irrupción que tiene en la mira a Tacna y Moquegua.
“En el área de cemento, tenemos la firme decisión de salir con nuestros productos, y esta planta cumple con las necesidades de abastecer las zonas norte de Chile y sur del Perú, por lo cual, si es necesario, vamos a ampliar la capacidad de la planta en otras 200 mil toneladas”, indica el presidente de Cementos Bío Bío, Hernán Briones Goich.
Este es solo el inicio de la estrategia en Perú, que Cementos Bío Bío profundizará con la construcción de una planta en el puerto de Matarani, cuya entrada en operación está prevista en 2020 con inversiones en torno a US$ 20 millones.
“Este proyecto está orientado hacia el área de Arequipa y más hacia el norte de Perú, la planta ya está comprada y empezaría a operar el próximo año”, detalla el directivo sobre esa iniciativa cuyo perfil es similar al de la planta de Arica, por lo que estará en condiciones de duplicar rápidamente su producción en la medida que los mercados lo requieran.
Ambos proyectos forman parte del plan Transforma 2021, cuyo programa a cuatro años iniciado en 2018 considera inversiones totales por US$ 150 millones.
Además del desarrollo del área cementera, también considera crecer en el negocio de la cal con sus próximos objetivos en Argentina y en Perú.
En el primer país, la empresa tiene una planta en el área de San Juan para cubrir las provincias centrales trasandinas, presencia que ahora planea ampliar a la zona norte, apostando a la oportunidad que ofrecen los casi 40 proyectos de desarrollo de litio y cobre que requieren cal para sus procesos. Para ello están evaluando varias iniciativas que esperan concretar en los próximos 18 meses.
“En el norte argentino hay proyectos de litio y ahí queremos estar aportando lo que sabemos en la tecnología de la cal con diferentes fórmulas. Hay conversaciones que están avanzando muy bien y si bien aún no hemos decidido nada, ya que esto tiene que pasar por el directorio, tenemos mucho interés en Argentina y está dentro de nuestra línea de acción, a pesar de que los permisos puedan demorarse”, señala.
En este escenario, Briones explica los ejes de la estrategia para completar el plan Transforma 2021, el cual tiene como gran horizonte la internacionalización de la empresa.
- ¿Cuántos recursos restan por invertir del monto total del plan?
- Quedan pendientes del orden de US$ 115 millones para los próximos años. Cementos Bio Bio tiene poca deuda, así que no tiene ningún problema para solventar ese tipo de inversiones a futuro.
- Además de los objetivos antes señalados, ¿qué otras inversiones están en carpeta?
- Nosotros vamos a crecer en cemento y en cal y vamos a buscar mercados, tanto de manera orgánica como no orgánica. Esto, posiblemente incluya adquisiciones y fusiones con otras compañías. La idea es crecer estudiando todos los proyectos que tengamos por delante, ya que nuestro plan es bastante ambicioso, pero al mismo tiempo es real.
- ¿Es la irrupción en el mercado peruano el principal objetivo?
- No solamente estamos mirando Perú; en esta línea de crecimiento en el área cementera y de cal, estamos mirando Latinoamérica en general, y analizando Colombia y Ecuador. Nosotros no tenemos miedo a salir.
- En años pasados, el grupo tuvo presencia en la región en sus negocios de gases (Indura) y de porcelanas, en los cuales desinvirtió. ¿De qué manera recoge esta experiencia en la internacionalización que ahora emprende en el rubro del cemento y cal?
- En el caso de Indura, esa fue una compañía que tenía solo el 40% de sus ventas en Chile y que expandimos a nivel latinoamericano. En un momento dado, se dio la oportunidad de vender a un buen precio y así se hizo, y por eso nos dedicamos más a los rubros del cemento y de la cal, que son nuestro negocio principal hoy. Por eso, señalo que estamos acostumbrados a trabajar afuera porque lo hemos hecho antes, y además, estamos presentes en varias áreas como es el caso de la biotecnología.
- En un momento en el cual muchas empresas productivas e industriales han cerrado operaciones en Chile, ¿qué factores lo motivan a seguir invirtiendo?
- Hay un término muy importante: empresa que no crece, se muere; eso está en un libro que hizo mi padre hace unos 15 años. Nosotros estamos en esa línea, queremos crecer y vamos a ver que el gobierno y el sistema nos acompañen.
Las claves de plan en Perú
Para el gerente general de Cbb, Enrique Elsaca, el objetivo final del Plan Transforma 2021 es "convertirnos en líderes en cemento y cal en la región en los próximos tres años". Una meta ambiciosa que partirá con la estrategia hacia el mercado peruano.
"En Perú hoy existen pocas opciones de cemento y esperamos ser una alternativa con un producto de calidad, cercano y competitivo, primero con la planta de Arica que va a ser la más cercana a las ciudades de Moquegua y Tacna, que tiene 400 mil habitantes y está a una distancia de 60 kilómetros. Y posteriormente con el proyecto de Matarani que va a abastecer a Arequipa y a otras zonas de ese país", señala el ejecutivo.